Los frenos son uno de los elementos de seguridad más importantes de un vehículo. Deben ser bien vigilados y, al menor signo de anomalía, revisados por un profesional. La de frenos es, por tanto, una de las pruebas clave de la ITV. ¿Sabes qué se mide en ésta y cómo funciona el procedimiento? Te lo vamos a contar junto a algo todavía más importante: Cómo llegar a la Inspección Técnica de Vehículos con los componentes de tus frenos en el mejor estado posible. ¡Vamos allá!
1. Cómo funciona la prueba de frenos de la ITV
En la prueba de frenos de la ITV se miden tres conceptos: eficacia, desequilibrio y ovalidad. Esta última evalúa la regularidad en la frenada. Para realizar la prueba se emplea un frenómetro, máquina que has visto en numerosas ocasiones y que se compone de unos rodillos que analizan la reacción de los frenos del vehículo cuando las ruedas están en movimiento. Primero se mide el eje delantero y después el trasero. Sin duda has experimentado esta prueba en numerosas ocasiones y sabes lo breve que es, lo cual no significa que no sea de gran importancia.
2. Antes de ir a la ITV
Ahora bien, ¿cómo asegurarte de llegar a la ITV con todas las garantías para pasar esta prueba? Lo esencial para tu seguridad y la de quienes circulen junto a ti en carretera es que los discos y las pastillas de freno estén en una perfecta condición de usabilidad. La recomendación genérica es revisar los frenos cada 15.000 o 20.000 kilómetros aproximadamente. Y antes, si detectas irregularidades como vibración u oscilación. Otras anomalías a las que debes prestar atención son ruidos cuando frenas, formación de líneas circulares, grietas o desgaste en la banda de frenado, signos de sobrecalentamiento… También los desequilibrios al pisar el pedal de freno son un signo de que algo va mal.
3. Cambio de discos y pastillas de freno
Si ha llegado el momento de renovar tus frenos, recuerda que, al cambiar los discos, es necesario también cambiar las pastillas: Si uno de ellos se encuentra desgastado y el otro no, terminará dañándolo inevitablemente, pues funcionan como elementos simbióticos. Las pastillas se desgastan antes que los discos. Habitualmente duran la mitad de tiempo. En todo caso, el consejo es siempre apostar por la calidad: Te beneficiarás en tiempo de usabilidad y en seguridad también.
4. Mantenimiento de frenos
Por descontado, el uso que des a los frenos de tu vehículo y el modo en que los utilizas tienen mucho que ver en su durabilidad y en el estado en que lleguen a la próxima inspección técnica. Algunos consejos básicos de conducción eficiente para frenos son: Utilizar marchas cortas en las pendientes de descenso, respeta las distancias de seguridad para evitar frenadas bruscas, cambia el líquido de frenos cada dos años o 40.000 kilómetros, utiliza el freno motor cuando sea procedente.
Con esta información y consejos no tendrás ningún problema con tus frenos la próxima vez que te acerques a pasar tu ITV de coches, ITV de motos o de cualquier otro vehículo. Te esperamos en ITV Cabezo Cortado, tu ITV en Murcia.